Ministerio de Energía impulsa equidad energética en La Araucanía: 30 escuelas rurales cuentan con agua caliente y electricidad segura

• Entre las escuelas más destacadas por su ubicación y precariedad de la red eléctrica se encuentran la Escuela Quinquén (Lonquimay) y la Escuela Mahuidache N°417 (Freire), ambas equipadas con sistemas fotovoltaicos que garantizan generación autónoma de energía eléctrica.

El Ministerio de Energía alcanzó un hito histórico en la región de La Araucanía al completar el proyecto “Escuelas Rurales”, que benefició a 30 establecimientos educativos ubicados en zonas rurales, aisladas y vulnerables. La iniciativa busca cerrar brechas históricas en el acceso a servicios básicos, entregando soluciones integrales de energía solar y normalización eléctrica, mejorando las condiciones de aprendizaje y bienestar de cientos de estudiantes.

Las obras físicas finalizaron en marzo de 2025 y, desde agosto, se han realizado ceremonias de inauguración en distintos territorios. Entre las escuelas más destacadas por su ubicación y precariedad de la red eléctrica se encuentran la Escuela Quinquén (Lonquimay) y la Escuela Mahuidache N°417 (Freire), ambas equipadas con sistemas fotovoltaicos que garantizan generación autónoma de energía eléctrica.

Cada escuela recibió una placa conmemorativa de la Seremi de Energía, en reconocimiento al compromiso con el desarrollo sostenible y la mejora de la infraestructura educativa rural.

El Seremi de Energía, Camilo Villagrán se mostró conforme con este logro. “Cumplimos, en 2022, La Araucanía presentaba uno de los mayores rezagos del país en materia energética rural. Más de 750 niños y niñas asistían diariamente a escuelas sin agua caliente, sin instalaciones eléctricas seguras y sin iluminación adecuada. Hoy, gracias al trabajo sostenido del gobierno del Presidente Gabriel Boric, hemos impulsado mejoras concretas que devuelven dignidad y condiciones básicas a nuestras comunidades rurales. Garantizar servicios básicos no es una ayuda: es justicia territorial y un compromiso del Estado con los derechos de todas y todos.”

El proyecto priorizó comunas de alta ruralidad y vulnerabilidad como Galvarino, Lumaco, Freire y Lonquimay, donde las condiciones climáticas y la dispersión geográfica hacen más urgente el acceso a soluciones energéticas autónomas y seguras. Con la intervención en 30 escuelas, esta iniciativa se consolida como una de las más relevantes en equidad energética para la educación rural en el país.