- Con 41 data centers y un Plan Nacional en curso de $2.300 millones de dólares invertidos en los últimos cinco años, Chile se ha posicionado como un hub importante para la industria de los data centers en la región. Refrigeración líquida y eficiencia energética son algunos de los puntos a reforzar para que estas infraestructuras sean más sostenibles.
La acelerada expansión de los data centers, impulsada por el uso de la nube, big data e inteligencia artificial, plantea un gran desafío para la sostenibilidad de estas infraestructuras. Pese a que son pilares de la transformación digital, su elevado consumo energético, uso del agua y emisiones asociadas requieren de un compromiso de toda la industria para fortalecer centros de datos más sostenibles.
Actualmente, los data centers demandan grandes cantidades de energía para operar. Según la Agencia Internacional de Energía (IEA), su consumo es de entre el 1% y 2% a nivel eléctrico mundial, porcentajes que podrían duplicarse para 2030.
En ese sentido, cabe destacar que en Chile ya existe un marco en desarrollo con el Plan Nacional de Data Centers 2024-2030, dado que uno de sus objetivos apuntan a promover una infraestructura digital que sea eficiente energéticamente y reduzca el impacto ambiental. Además, ya hay 41 proyectos y $2.300 millones de dólares invertidos en los últimos cinco años.

Para que esta industria de gran relevancia en Chile opere de forma más sostenible, Gabriel Estay, Director de Secure Power y Data Center para el Clúster Sur Andino de Schneider Electric afirma que “al funcionar las 24 horas del día, estas grandes estructuras consumen una cantidad enorme de electricidad.
Para reducir el impacto ambiental, la refrigeración juega un rol esencial, pero no es lo único, puesto que también se debe tener en cuenta la permanente colaboración entre organismos privados y públicos, ya que mejorar la sostenibilidad de data centers se logrará solo con regulaciones pertinentes, pero sin afectar el desarrollo económico”.
El experto de Schneider Electric entrega las claves para avanzar en esta materia:
- Eficiencia energética: Es necesario que los nuevos data centers consideren desde su concepción este concepto. Esto incluye optimizar la ventilación, aprovechar la climatología natural de Chile, impulsar diseños que delimiten los pasillos calientes de los fríos, y así disminuir pérdidas energéticas de estas infraestructuras eléctricas.
- Refrigeración eficiente: Una parte importante de la demanda energética de los data centers proviene del enfriamiento. Las tecnologías de refrigeración líquida, enfriamiento evaporativo o uso del aire exterior pueden reducir significativamente el consumo energético y el uso de agua.
- Gestión del agua: El agua es un recurso cada vez más escaso, y su utilización en sistemas de refrigeración o humidificación puede tener impactos ambientales significativos. Por ende, se deben incentivar tecnologías que disminuyan el consumo de agua o que la reutilicen, como el enfriamiento adiabático (aprovechamiento de la evaporación para enfriar el aire) o geotermia (uso de la masa térmica del subsuelo para disipar el calor).
- Estándares transparentes: Hay que adoptar las métricas reconocidas como PUE (Power Usage Effectiveness), WUE (Water Usage Effectiveness) o CUE (Carbon Usage Effectiveness), y reportar regularmente el desempeño energético, hídrico y de emisiones de los data centers, para así permitir comparaciones, fijar metas y aplicar mejoras continuas.
Por último, la inteligencia artificial es clave para fortalecer el camino hacia unos centros de datos más sostenibles. En esa línea, “la plataforma EcoStruxure Resource Advisor de Schneider Electric monitorea y gestiona en tiempo real la demanda energética de data centers, de modo que eficientiza su operación”, concluye Estay.